En los días de la conmemoración del Politécnico, no podemos y no queremos olvidar las implicaciones antimilitaristas de la revuelta. En plena dictadura militar, una de las consignas centrales del Politécnico ocupado en el ’73 fue «Fuera la OTAN». Retomando aquel hilo conductor, la anarquía hoy debe encontrar la manera de actuar directamente contra aquellos que se benefician y ganan con estas guerras.
Mientras buscamos desarrollar consideraciones y análisis anarquistas de cada conflicto belico interestatal, a menudo se ignora uno de los aspectos más importantes de la multifacética lucha antimilitar: sabotear la máquina de muerte en el mismo terreno en el cual nos encontramos.
Dado que estamos en el territorio de influencia de la OTAN, tenemos el deber de sabotear todo aquello que viene utilizado por las fuerzas armadas del Estado griego y de sus aliados, desde la industria armamentística hasta los financieros y todos aquellos que dan órdenes y toman decisiones.
Junto a la invasión del territorio ucraniano por parte del Estado ruso, la guerra del Estado turco contra el pueblo kurdo, mientras que los Estados Unidos libra guerras en todo el planeta. En todos estos casos, DB Schenker participa activamente, apoyando y beneficiándose de estas guerras. Es una empresa estatal alemana, propiedad de la Deutsche Bahn (DB, la compañía ferroviaria alemana) y controlada por el Ministerio de Transporte alemán. Es una empresa responsable de crímenes de guerra durante la Segunda Guerra Mundial y hoy mantiene centros de cadena de suministro en docenas de territorios en todo el mundo, transportando y entregando equipos de guerra, armas y repuestos para vehículos, tanques y aviones de guerra. En 2019, DB Schenker ha recibido un premio del Departamento de Transportes de los Estados Unidos por su cooperacion con el Departamento de la Defensa de los Estados Unidos, ya que parece ser que haya pocas guerras transnacionales en las cuales DB Schenker no transporta armas en primera línea.
La empresa madre, Deutsche Bahn, es la responsable del proyecto “Tren Maya”, el desarrollo de líneas ferroviarias en México, incluida la región de Chiapas, líneas que servirán al ejército mexicano.
Este proyecto destruirá grandes extensiones de bosques donde viven miles de personas. Obviamente es la base de un plan mayor para presionar al Estado mexicano contra la tierra liberada zapatista, y la resistencia contra esto ya ha comenzado.
Mientras la policía griega ocupaba gradualmente Exarcheia, en un intento de suprimir la memoria de la resistencia contra la junta militar, la mañana del 15 de noviembre, llevamos a cabo un atentado incendiario contra un camión DB Schenker en la calle Baltinon en Gyzi. Aunque sabemos que un camión destruido no detendrá ninguna guerra, tenemos el deber de saber reconocer los engranajes que ponen en marcha las máquinas de guerra del Estado y desmantelarlas pieza por pieza.
Solidaridad con la lucha del pueblo kurdo contra el estado turco.
Solidaridad con el prisionero Dimitris Hatzivassiliadis
Apoyamos a los 4 compañeros encarcelados por el caso de la policía de trafico del Pireo.
Victoria para la huelga de hambre de Alfredo Cospito.
Anarquistas
Fuente: athens.indymedia.org via actforfree.noblogs.org
Fuente: infernourbano.altervista.org
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