Ayer día 4 de marzo, inspirad@s en l@s compañerxs de Torino, alrededor de 40 personas nos concentramos ante el Teatro Arriaga de Bilbo, en una convocatoria unitaria de diversos colectivos y organizaciones anarquistas así como la asociación pro-presxs Salhaketa. Con una pancarta, banderas y megafonía, estuvimos coreando consignas, repartiendo octavillas y pegatinas a la gente que pasaba y se acercaba durante algo más de una hora. En un momento dado se encendieron un par de bengalas roja y negra, y para finalizar la concentración se procedió a leer la última carta de Alfredo Cospito.
A pesar de una continua presencia policial no hubo ningún problema.
Posteriormente un participante fue entrevistado en directo por la radio libre de Torino Radio Blackout, que en ese momento se encontraba sitiada por la policía. Algunxs compañerxs permanecieron de guardia, en contacto con lxs amigxs de Torino, preparando y difundiendo la información a medida que llegaba desde allí.
radioblackout.org
Imágenes recibidas junto a un breve vídeo, que puedes ver en el siguiente enlace
[Recibido al correo – de Borrokan]
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Nota de lucharcontrael41bis:
A través de los micrófonos de Radio Onda d’Urto, entre otras, algunxs compas comentaban cómo las fuerzas policiales desviaron la manifestación del centro de la ciudad hacia barrios populares, donde habita “población sacrificable”, (como porta palazzo, donde se erigieron barricadas y posteriormente al balon). Una vez fuera del centro, comenzó el ataque policial con agua a presión y lacrimógenos, alcanzando a viandantes que nada tenían que ver, para terminar dividiendo la mani en dos y dirigiendo tácticamente una parte hasta la calle donde se encuentra la sede de radio blackout. Allí encontraron un “refugio” que resultó ser una encerrona y un pretexto para atacar un medio de contrainformación: totalmente asediada, con todas las calles de acceso bloqueadas por fuertes dispositivos policiales, con chorros de agua a presión dirigidos contra la entrada (y única salida) al patio interior del edificio que alberga otras muchas asociaciones, y una lluvia de gases lacrimógenos. Poco antes había terminado un partido de fútbol entre niños inmigrantes (de nuevo “población sacrificable”), que todavía se encontraban en el lugar.
Horas después, dentro de los estudios de Radio Blackout, con las ventanas cerradas, aún olía a gas.
Al día siguiente el propietario del edificio declaraba que «La presencia de Radio Blackout dentro de la Casa del Barrio ya no es compatible independientemente del episodio que ocurrió anoche. Esos espacios deben estar disponibles para actividades a favor de los niños, las familias y los ancianos del barrio».