El porqué de una lucha

El porqué de una lucha.

Nos han dicho varias veces “¿porqué os calentáis tanto con la lucha de Alfredo Cospito?” “¿Qué tienen que ver las feministas con Alfredo Cospito?” y, de hecho, el feminismo, ese que se autodefine así y que es popular, permanece en silencio. Algún artículo de mujeres que dicen ser feministas pero nunca de impronta feminista. Pero, por otra parte, el feminismo no ha tocado un mar de cuestiones fundamentales de esta fase historico-política, cuando se ha posicionado explícitamente del lado del poder, por lo que el hecho no nos sorprende en absoluto.

Así hemos decidido tomar la palabra, porque nosotras apoyamos la lucha de Alfredo precisamente porque somos feministas.

Porque nosotras no olvidamos.

No olvidamos que nos han torturado, masacrado, demonizado y quemado en hogueras para instaurar el nuevo orden capitalista.

No olvidamos que las sufragistas tuvieron que poner bombas en papeleras, y que también fueron asesinadas para obtener algo risible como el derecho al voto.

No olvidamos que todas las veces que hemos rechazado la norma impuesta nos han hecho pasar por histéricas y locas, y nos han encerrado en sanatorios y manicomios.

No olvidamos a las compañeras que has sido asesinadas a sangre fría por las llamadas fuerzas del orden de este Estado ni a las torturadas en los años setenta y ochenta en las cárceles italianas por los mismos que luego crearon el 41 bis.

No olvidamos a las que todavía están prisioneras y a las que están en 41 bis.

Sabemos que la libertad que tenemos solo es una apariencia, una libertad condicional.

Sabemos que no podemos disponer de nuestro cuerpo, podemos abortar sólo según la ley de este Estado, y si lo hacemos fuera de las reglas es delito. No es verdad que el aborto esté despenalizado: si quisiéramos tomar la autodeterminación de abortar entre nosotras terminaríamos en la cárcel.

Sabemos cuanto se ha chantajeado, coartado, perseguido, demonizado, en estos últimos dos años de la llamada pandemia, a todas las que no compartían las reglas arbitrarias impuestas por este Estado, llegando a ser despedidas, privadas de la subsistencia, privadas de la posibilidad misma de participar en el consenso social.

Sabemos que este sistema está utilizando el feminismo y la diversidad para presentarse como atento,sensible, civil y democrático aprovechando la traición de aquellas que se prestan al colaboracionismo.

Porque eso es lo que el Estado quiere de nosotros: colaboración y delación.

Hemos asumido la lucha de Alfredo Cospito no porque luchemos por Alfredo, luchamos con Alfredo y con todas las prisioneras y prisioneros en las cárceles italianas y en el resto del mundo, porque luchamos por nosotras mismas.

Coordinamenta femminista e lesbica

 

Traducido de: ilrovescio.info